Rebellion
Hola mundo:
En esta entrada os
ofrezco una crónica de la partida que jugamos el pasado fin de
semana a Star Wars: Rebellion, el famoso juego que recrea el
conflicto de La Guerra de las Galaxias a una escala total. Naves,
tropas de tierra, héroes y planetas tienen cabida en este producto
imprescindible para los fans de la saga.
Su página de la Board
Game Geek es esta:
Fue un partida muy larga
dado que la mayoría de jugadores no lo habían probado, pero si por
algo se caracteriza Star Wars: Rebellion es por el sentido
cinematográfico de su mecánica, lo hace que el ritmo de juego sea
muy llevadero. Todo lo que ocurre es interpretable como si de una
película de la saga se tratara. No en vano, varios acontecimientos
de la partida bien hubieran valido un spin-off en forma de película
para ser tratados como se hubieran merecido. Vamos a ello.
Preparando el despligue inicial...
Después de los primeros
escarceos, el Imperio empezó en serio su búsqueda de la base
rebelde, ya que es su única condición de victoria para ganar. Por
el contrario, si la Rebelión consigue esconder su base lo suficiente
al tiempo que aumenta su prestigio ante la población de la Galaxia
mediante acciones contra el Imperio, acaba por imponerse. Los
rebeldes colocaron varios señuelos en forma de concentraciones de
tropas en planetas importantes, sugiriendo al jugador imperial que la
base rebelde estaba efectivamente en alguno de ellos. El Imperio no
entró al trapo, pero al permitir que la Rebelión prosperara en las
regiones más alejadas del núcleo galáctico, el apoyo popular a la
escoria rebelde se hizo sentir y su prestigio fue creciendo
lentamente entre los ciudadanos hartos de vivir bajo la bota de
hierro del Emperador.
Fue en este punto en que
se produce uno de los episodios más peliculeros de la partida. Boba
Fett consigue capturar a Chewbacca y lo deja preso.
Pobre Chewie, no sabe la que le espera.
Al mismo tiempo,
Luke Skywalker entró en juego, y los rebeldes tuvieron que elegir
entre usarlo para liberar al wookie o dejar que siguiera su destino y
partiera en busca de Yoda. Finalmente se dicieron por esto último,
lo que no debió de sentar demasiado bien al pobre Chewie, y eso que
lo peor estaba por llegar, aunque a cambio los rebeldes consiguieron
que Luke se convirtiera en un auténtico Caballero Jedi.
El Retorno del Jedi
El Imperio decidió
liberar deliberadamente a Chewbacca pero colocándole una baliza de
seguimiento que le permitiera revelar inadvertidamente la posición
de la base rebelde. En respuesta, Leia Organa fue enviada para evitar
la liberación de Chewbacca por miedo a que atrajera a las fueras
imperiales. Eso acabó con la paciencia del felpudo con patas, que no
dudó en pasarse al Lado Oscuro en cuando el Emperador llamó a su
puerta.
Chewbacca se siente abandonado y se va con los malos.
De repente, los rebeldes
se encontraron con seis líderes y el Imperio con nueve, ya que
Chewbacca ya podía ser utilizado libremente como agente imperial.
Lejos de arredrarse, lanzaron una campaña de ofensivas militares no
tanto con el objetivo de recuperar terreno sino de demostrar a la
Galaxia que eran una fuerza a ser tenida en cuenta, lo que les
reportó no pocos puntos de prestigio. En uno de ellos fueron incluso
capaces de destruir una segunda Estrella de la Muerte antes de que su
construcción se hubiera completado.
El tiempo se agota...
El capítulo final de
esta historia estaba a punto de empezar. Después de una búsqueda
interminable, y con el contador de tiempo corriendo inexorable en
contra del Imperio, una pequeña fuerza de soldados de asalto se
tropieza por casualidad con la base rebelde y avisa al alto mando de
su descubrimiento.
Endor, nuevamente el escenario de la batalla final.
Inmediatamente, la Estrella de la Muerte y todas
las fuerzas imperiales disponibles se lanzan a por ella y se lanzan
dos ataques casi desesperados para intentar destruirla.
Por desgracia
para el Emperador ya es demasiado tarde, y de nada sirve capturar y
congelar en carbonita al pobre General Dodonna.
Los rebeldes intentan dos veces destruir la Estrella de la Muerte gracias a los planos robados y dar el golpe final, pero ninguno de sus intentos tiene éxito.
La Estrella de la
Muerte no sólo no va a llegar a tiempo antes de que finalice la
partida, sino que además los rebeldes lanzan nuevos ataques que
aumentan su prestigio y precipitan el final de la contienda. La
opresión del Imperio ya es insoportable y los ciudadanos de la
Galaxia se rebelan en masa contra la autoridad imperial. La Rebelión
ha triunfado.
Si el indicador de tiempo y el prestigio de la Rebelión coinciden, la Rebelión gana.
Como habéis visto, el
desarrollo de la partida se presta fácilmente a escribir un relato
con las vicisitudes de los Líderes y las batallas libradas por las
fuerzas espaciales y terrestres. Se ha primado el papel de los
personajes por encima de los contingentes armados, ya que las
batallas se resuelven de una manera bastante sencilla, y la
producción de nuevas unidades de combate es automática dependiendo
únicamente de los planetas controlados por cada bando, aunque el
despligue de esas unidades sí que debe ser muy cuidadoso para no
dejar flancos expuestos. Los rebeldes siempre estan dispuestos a
aprovechar una oportunidad de causar daño al Imperio en donde más
daños puedan causar, aumentar su prestigio y acortar la duración de
la partida en su beneficio.
A veces los dados son propicios
Otras veces, no tanto...
En resumen, una gran
sesión de juego que dejó a todos con ganas de repetir. Permanezcan
atentos a este blog si quieren nuevos relatos de las luchas entre el
Imperio y la Rebelión.
Nos vemos más allá del
Rvbicón.
Johnny Palillo
Johnny Palillo
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